El estado de la red vial provincial vuelve a situarse en el centro de la escena, luego del reinicio de la obra pública en Tucumán. Según datos oficiales, la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) administra un total de 2.143 kilómetros de carreteras que están bajo su jurisdicción. De ese total, 1.066 kilómetros cuentan con pavimento, y forman parte de lo que se denomina red vial primaria. Las rutas con superficie de ripio -es decir, la red vial secundaria- se extienden a lo largo de 930 kilómetros. Por último, las huellas o caminos naturales suman 147 kilómetros. Además, debido al variado relieve de la provincia y la existencia de abundantes ríos y arroyos hacen que la DPV gestione un promedio aproximado de un puente cada 12 kilómetros de ruta.

Desde octubre de 2023, previo al cambio de gobierno nacional, se registró un parate en la inversión estatal para obras públicas, en especial, en los proyectos que contemplaban recursos de origen federal. La falta de fondos tuvo un impacto directo en el estado de los caminos a cargo de Vialidad Provincial, que son esenciales no sólo para el desarrollo de la producción, sino también para el traslado cotidiano de los tucumanos y para otras actividades clave que tienen lugar en la provincia, como el turismo.

En los últimos días, en la repartición con sede central en calle Mendoza 1.565 se anunció a LA GACETA una inversión superior a los $6.000 millones para trabajos de repavimentación, demarcación y limpieza de la red vial provincial. El listado de obras incluye la ruta provincial 307, en el tramo Ampimpa-Amaicha hasta el inicio de la ruta 40, que tendrá reimpulso a partir del convenio firmado por el Poder Ejecutivo con la Jefatura de Gabinete de la Nación. También en la zona de los valles, sobre el río Santa María, se avanzó con la recuperación estructural del puente, donde se busca una solución definitiva. A su vez, se dieron a conocer distintas mejoras en el acceso a El Cadillal, sobre la ruta provincial 347, y la repavimentación y limpieza de un tramo de 6 kilómetros de la ruta provincial 334, entre La Cocha y Los Pizarro; y se anunció que esta semana se comenzará a movilizar los equipos para dar inicio a los trabajos en la ruta 325, entre Monteros y El Cercado.

En la Legislatura, representantes del oficialismo y de la oposición mantienen el foco en el estado de la red vial provincial. “Es esencial el mantenimiento y pavimentación de los ‘caminos de la producción’, que en su mayoría no se encuentran en óptimas condiciones de circulación por falta de mantenimiento, iluminación y señalización”, reza una de las iniciativas impulsadas por el PJ. Desde las bancas de la UCR, en tanto, afirmaron que en los últimos ejercicios hubo una “subejecución” de las partidas presupuestarias destinadas a este rubro, y que la mayor parte de los recursos de la DPV se destinan a sueldos, y no a obras públicas.

Más allá de los contrapuntos, resulta crucial que se otorgue la prioridad que amerita a los caminos de la provincia. La falta de inversión registrada particularmente en los últimos meses impide que, en el corto plazo, se pueda resolver todo el mapa de las rutas. En ese sentido, el anuncio de que se destinarán $6.000 millones resulta positivo, pero es importante que esta política sea sostenida en el tiempo.